Antes de llegar la idea que tenia de Australia era la de un sitio salvaje colonizado por presos y fulanas inglesas, con una mezcla de cultura entre Estadounidense e Inglesa,y no es así, o si ?
Lo que esta claro es que tienen una identidad propia y una forma de hablar especial.
Físicamente son bastante ingleses con esa forma peculiar en su forma de vestir pero por la que nadie se da la vuelta aunque parezcan disfrazados. No son especialmente guapos ni con cuerpos espectaculares, es mas ellos pecan de piernas delgaduchas estilo Russell Brand y ellas son un objetivo perfecto para los Big Boobs Lovers que aquí estarán en su salsa ya que ademas de tenerlas, las exhiben con grandes escotes.
Hay que reconocer que también hay tíos musculosos y bastante gente con aspecto surfer descuidado pero molón, molones son algunos de los muchisimos tatuajes que llevan por todo el cuerpo, es algo exagerado lo aficionados que son, también a los piercings pero menos. Algunas de las mujeres ni siquiera llevan agujeros en las orejas, quizás aquí no es costumbre.
Lo de los aborígenes en las grandes ciudades es mas de lo mismo, ocurre con los Inuit en Canada, los Indios en USA o los nativos de Alaska, siempre están en el escalón mas bajo, probablemente sea que no lo tienen fácil, pero es que no se ve ni una excepción, en el mejor de los casos son humildes trabajadores viviendo en los barrios mas sencillos y menos lujosos. En otros casos son vagabundos, alcohólicos o las dos cosas que van vociferando por las calles envueltos en harapos. Físicamente son inconfundibles con un tono de piel rojo oscuro similar a la tierra del desierto, y con unos rasgos similares a los dibujos que se presentan de hombres primitivos sin evolucionar, es destacable el que no se vean apenas mujeres aborígenes y las que se ven son similares a sus hombres
La gente en Perth es muy correcta y educada, se nota que tienen conciencia de que viven en un sitio con una calidad de vida alta y lo cuidan, barbacoas de aluminio en parques publicos impolutas, merenderos sin daños ni pintadas, parques infantiles intactos, y césped sin apenas papeles por el suelo. Los precios de las cosas son bastante altos y eso que el cambio ayuda, pero la gasolina a 1,17$ o 1,33$ el litro no es una ganga. La comida no es un robo pero todos los extras a excepción de la cerveza son caros, un trozo de tarta 7$, una botella de agua 3$ o un café 3,5$ es mucho para lo que estamos acostumbrados, aunque es justo reconocer que también encuentras botellas de zumo de 1 litro por apenas 2$, curioso.
También es cierto que sentarte en cualquier sitio y pasar un largo rato con solo una consumición no es un problema y el camarero no te agobia ni te mira demasiado.
Los libros bien de precio, las revistas caras, en torno a 8$ y el resto de las cosas con la globalización, apenas hay diferencia en ropa o electrónica, una nota para los fashionistas: unas Uggs, en torno a los 300$.
Lo del idioma es curioso, no tan cantarín ni vocalizado como el Londinense, ni tan fluido ni chicloso como el de los USA, cuesta mucho entenderles y cuando les pides que repitan lo hacen a una velocidad endiablada, será cuestión de acostumbrarse.
Mas en próximas entregas.
Veo que os lo estais pasando muy bien...ME ALEGRO!!! un besote, seguiremos impacientes a la próxima entrega
ResponderEliminar